el muequista

1 comentario:

Hector dijo...

Esteban, de nuevo la misma cosa ... me quedo en silencio frente a tu dibujo "a ver que pasa", lo veo, lo recorro ... y de pronto, no se muy bien si a los 5 minutos ... o a los 15, los trazos me miran a mi. El muequista me observa, te juro ... está escudriñando cada actitud mia, me sopesa como jugando al poker ... como quien busca más muecas que incorporar ... y a cada nueva -en tanto, profesional del gesto y el mimo- se vuelve insoslayable. Una suerte de Meduza. Aquella te convertía en piedra si la mirabas ... este desnuda los rasgos de quien lo ve. Te deja laxo, pensando en todas las cosas que te faltan saber aún, y en la posibilidad de que jamás las sepas.
Si no te contesto con la premura con que me gustaría, es justamente porque tengo que dusponer del tiempo que requiere la observación del hecho artístico. Hallado el tiempo ... el disfrute, la reflexión ... o ambas cosas, inexorablemente suceden.
Un abrazo!